¿Cómo ayuda la tecnología a un productor musical?

Historia de la tecnología musical

Cuando entro en el estudio del productor musical Oak Felder en las colinas de Los Ángeles para el episodio 4 de El futuro de la música, no parece un estudio de discográfica “tradicional”. Eso es porque no lo es. Felder compró la propiedad y la transformó de una casa a un recinto vibrante y chill-out que resulta tener un estudio de grabación totalmente construido en el nivel inferior. Puede que sea el nivel superior de lo que es un estudio casero moderno, pero no por ello deja de ser reconocible como un estudio casero.

Oak Felder es un compositor y productor discográfico que es la mitad de Pop & Oak, responsables de éxitos como “Your Love” de Nicki Minaj, “Here” de Alessia Cara y “Sorry Not Sorry” de Demi Lovato, entre muchos otros. Divide su tiempo entre Atlanta, donde está su verdadero hogar, y Los Ángeles en este estudio casero con esteroides. Aunque las celebridades entran y salen de este espacio con regularidad para crear sus próximos éxitos, si se observa detenidamente el equipo que utiliza Felder para crear todas esas canciones que se escuchan en la radio, no es muy diferente del que utilizan los productores de dormitorio de todo el mundo. En lugar de una gran mesa de mezclas tradicional, hay una mesa para su portátil, donde se conecta y trabaja con el DAW de Apple, Logic.

Nuevas tecnologías en la industria musical

La Licenciatura en Tecnología Musical, Emprendimiento y Producción lleva a los estudiantes al interior del estudio de grabación y los prepara para las carreras detrás de escena en la industria musical. Los estudiantes desarrollan una competencia excepcional en todos los aspectos del proceso de creación musical.

La ciudad de Nueva York es la cuna de los artistas más emblemáticos del mundo y de las empresas pioneras de la industria musical mundial de 20.000 millones de dólares. Los graduados del programa cuentan con las herramientas necesarias para desarrollar carreras de éxito en el ámbito del emprendimiento creativo, la gestión de locales, la distribución, la interpretación, la composición de canciones, la ingeniería y la producción.

El programa cuenta con un enfoque de aprendizaje experimental, basado en el mundo real de la producción y el marketing musical, y sigue un modelo de cohorte de aprendizaje que sitúa la colaboración entre pares en el centro de la experiencia educativa. El programa se fundó en torno a cuatro pilares vitales para el éxito del músico moderno:

Música y tecnología

Con la rapidez con la que cambia la tecnología, cuando se trabaja en las industrias creativas hay que estar al tanto de las tendencias y los cambios actuales y de cómo afectan a nuestro trabajo. En lo que respecta a la producción musical, ha habido una gran variedad de avances tecnológicos que han transformado la forma en que no sólo producimos, sino que escuchamos y trabajamos con la música.

El software digital ha sido, sin duda, el mayor cambio en la producción musical, ya que ha permitido a músicos de todos los niveles escribir, grabar y producir sus propias canciones con una calidad razonable. Los programas de estaciones de trabajo de audio digital (DAW) como Avid Pro Tools o Logic Pro de Apple -las salas de máquinas de la mayoría de los estudios de grabación- permiten a los usuarios editar simultáneamente más de 100 pistas de audio, ajustar el tono y el tiempo y añadir una infinita variedad de efectos.

Desde que apareció el MIDI, ya no es necesario traer una banda de música completa para conseguir ese efecto en una pista. Los compositores pueden ahora componer elaborados arreglos mediante sintetizadores y programas de producción musical, lo que ofrece a los artistas más libertad creativa y la posibilidad de trabajar con instrumentos a los que antes no tenían acceso o no sabían utilizar.

El impacto de la tecnología en la industria musical

Este artículo se centra en la tecnología musical digital y sólo hace referencia a la tecnología analógica para proporcionar un contexto histórico. Para obtener información más detallada sobre las tecnologías musicales analógicas, consulte Tecnología musical (eléctrica)

Las tecnologías musicales digitales se utilizan ampliamente para ayudar a la educación musical en la formación de los estudiantes en el hogar, la escuela primaria, la escuela secundaria, la escuela superior y los programas musicales universitarios. Los laboratorios de teclados electrónicos se utilizan para la enseñanza rentable de piano en grupo para principiantes en institutos, colegios y universidades. Los cursos de software de notación musical y manipulación básica de audio y MIDI pueden formar parte de los requisitos básicos de un estudiante para obtener un título de música. Existen aplicaciones móviles y de escritorio que ayudan al estudio de la teoría musical y el entrenamiento auditivo. Los pianos digitales, como los que ofrece Roland, ofrecen lecciones y juegos interactivos que utilizan las funciones integradas del instrumento para enseñar los fundamentos de la música[4].

El desarrollo de las tecnologías musicales digitales se remonta a las tecnologías musicales analógicas de principios del siglo XX, como el órgano electromecánico Hammond, inventado en 1929. En la década de 2010, el abanico ontológico de la tecnología musical ha aumentado enormemente, y ahora puede ser electrónica, digital, basada en software o incluso puramente conceptual.