¿Cómo saber si mi hijo está Descuajado?

Trastorno de adaptación

Mientras que algunos niños son resistentes a los acontecimientos estresantes y a otros cambios vitales importantes, otros tienen dificultades para recuperarse. Un niño que muestra cambios de humor o comportamiento después de un acontecimiento vital estresante puede tener un trastorno de adaptación.

Los trastornos de adaptación están causados por una respuesta inadaptada al estrés. Se producen por algún tipo de cambio en la vida del niño. Hay muchos tipos de acontecimientos estresantes que pueden provocar un trastorno de adaptación en los niños, entre ellos:

Sin embargo, no todos los niños que experimentan acontecimientos estresantes desarrollan trastornos de adaptación. Y lo que un niño considera estresante puede no ser gran cosa para otro. Así, mientras que un niño puede desarrollar un trastorno de adaptación tras la separación de sus padres, otro niño de la misma familia puede no experimentar la misma respuesta.

Varios factores, como el temperamento del niño y las experiencias pasadas, influyen en que un niño desarrolle un trastorno de adaptación tras un acontecimiento estresante. Un sistema de apoyo sólido y unas habilidades de afrontamiento saludables pueden servir como factores de protección que reducen las posibilidades de que un niño desarrolle un trastorno de adaptación.

¿Tiene mi hijo una enfermedad mental?

Un trastorno de adaptación es una reacción emocional o conductual a un acontecimiento estresante o a un cambio en la vida de una persona. Los trastornos de adaptación son bastante comunes en niños y adolescentes. La reacción se considera una respuesta malsana o excesiva al acontecimiento o cambio en los tres meses siguientes a su ocurrencia. El acontecimiento puede ser cualquier cosa importante para el niño, como una muerte en la familia o un cambio de casa o de colegio. Los niños pueden mostrar signos de ansiedad, depresión o problemas de comportamiento.

Cada niño puede variar el punto en el que se encuentra en su desarrollo. La capacidad de hacer frente a las necesidades específicas relacionadas con el estrés depende de la edad y la madurez. Los trastornos de adaptación son una reacción al estrés excesivo y normalmente no hay una causa directa.  Algunos signos comunes de un trastorno de adaptación son:

Un experto en salud mental, como un psiquiatra, suele hacer el diagnóstico tras una evaluación. Pedirá una historia completa del desarrollo de su hijo, los acontecimientos de su vida, sus emociones, su comportamiento, su rendimiento escolar y el acontecimiento estresante. Los síntomas del niño deben ser peores de lo que se esperaría normalmente con este cambio de vida. Si los síntomas de su hijo no mejoran después de seis meses, puede haber otra razón.

Signos de trauma

Signos y síntomas del trastorno de adaptaciónAprenda sobre los efectos, las causas, los signos y los síntomas del trastorno de adaptación.  El Centro de Tratamiento Millcreek of Magee ofrece el mejor tratamiento residencial y programas a domicilio para niños y adolescentes que luchan contra el trastorno de adaptación.

Hay casos en los que los niños y los adolescentes luchan para hacer frente adecuadamente a los cambios significativos de la vida o manejar los acontecimientos importantes. Para estos niños y adolescentes, estos cambios y acontecimientos inesperados pueden dar lugar a graves sentimientos de angustia. Si se produce este tipo de reacción, es posible que el niño o el adolescente esté sufriendo un trastorno de adaptación y requiera tratamiento.

El trastorno de adaptación es una condición de salud mental que hace que los individuos experimenten alteraciones emocionales después de pasar por un cambio en la vida, lo que finalmente resulta en la aparición de problemas de comportamiento. Estas alteraciones emocionales y de comportamiento suelen producirse como resultado de la incapacidad de un niño o un adolescente para enfrentarse adecuadamente a nuevas circunstancias o situaciones. Puede haber un gran número de circunstancias que desencadenen la aparición de los síntomas propios del trastorno de adaptación, pero algunas de las más comunes son la pérdida repentina de un ser querido, el cambio de colegio, la mudanza a un nuevo hogar, la incorporación de un nuevo hijo a la familia, el divorcio de los padres o la supervivencia a un desastre natural. Los síntomas del trastorno de adaptación pueden permanecer hasta seis meses después del suceso y pueden hacer que los niños y adolescentes se comporten de forma inadecuada en la escuela, en casa o en entornos sociales.

Problemas de apego

El trastorno de adaptación se denomina a veces depresión situacional. A diferencia de la depresión habitual, cuya causa puede ser continua y/o no especificada, el trastorno de adaptación es una respuesta emocional y/o conductual anormal a los factores de estrés presentes en un periodo concreto de la vida de una persona, a menudo en torno a un acontecimiento vital importante.

Por ejemplo, una persona puede experimentar factores estresantes que den lugar a un trastorno de adaptación tras un cambio vital importante, como una ruptura, un divorcio, un matrimonio, el nacimiento de un bebé o una mudanza, o tras un acontecimiento desafortunado que implique estrés, como un accidente de coche. También es posible desarrollar el trastorno tras un cambio de carrera o una interrupción, especialmente uno que altere el entorno o la rutina diaria de una persona, como el alta del servicio militar o el quedarse sin empleo.

El trastorno de adaptación es más común en niños y adolescentes, pero los adultos también pueden desarrollarlo. El objetivo del tratamiento del trastorno de adaptación es aliviar los síntomas. Un programa de tratamiento típico para el trastorno de adaptación suele incluir un curso de terapia hablada, como la terapia cognitivo-conductual (TCC) o la terapia de grupo, y puede incluir la prescripción de medicamentos y la prescripción de ejercicios[2][3].